El artista local Diyar Al Asadi nació en Bagdad, Iraq, donde vivió durante la primera década de su vida antes de que las amenazas de muerte le obligaran a él y a su familia a huir de su patria a Egipto. Luego, en 2009, otro atentado contra sus vidas los llevó a encontrar un refugio seguro una vez más, pero esta vez en Jordania.
Mientras tanto, Diyar utilizó el arte como un medio para soñar, esperar y escapar. A lo largo de los años, estudió y colaboró con muchos artistas y profesores, entre ellos la artista rusa Eleni Alexander y la artista saudí Elham Jean. La mayor parte de su formación en arte islámico, sin embargo, vino de su tiempo trabajando bajo el profesor iraní Fatemeh Pourhatami en Jordania.
En 2012, Diyar se mudó a los Estados Unidos después de recibir una beca para la prominente Liga de Estudiantes de Arte de Nueva York, y hoy en día, llama a Phoenix su hogar, su comunidad, donde pinta obras altamente intrincadas y de gran escala que pueden llevar hasta 2,300 horas de creación.
Aquí está Diyar, en sus propias palabras, sobre lo que motiva su práctica creativa y las historias que se esfuerza por compartir a través de su arte.
“Pinto historias de los sufrimientos y las luchas de mi familia. Sin usar palabras, me he convertido en un narrador mudo en el lienzo”.
Diyar Al Asadi. Courtesy of the artist.
PhxArt: Cuéntenos acerca de quién es usted. ¿De donde es, y qué fue lo que lo primero inspiro a seguir el arte?
Diyar Al Asadi: Soy originario de Bagdad, Iraq, pero he vivido en Phoenix durante tres años, y mi familia se mudó aquí en 2019. Empecé a pintar a la edad de siete años, enseñándome a mí mismo a usar óleos con la ayuda de artistas locales en Bagdad. Después de vender todas mis pinturas a famosos artistas iraquíes, recibí una beca para estudiar arte en Egipto, pero debido a la invasión de Iraq en 2003, no pude aprovechar esa oportunidad. Después de que los militantes atentaron dos veces contra mi vida y la de mi familia por razones sectarias y políticas, finalmente salimos de Iraq para Egipto. Encontré inspiración al ver a mi madre y a mi familia luchar por sobrevivir y su voluntad de dejar lo que conocían por un futuro desconocido. Experimentar tanta dificultad con mi familia hizo que el arte fuera la única forma de viajar a una realidad mejor y pintar las historias olvidadas de mi familia.
PhxArt: ¿Cuáles son algunas de las historias de su familia que le gustan pintar, y qué más representa en su arte?
Al Asadi: Pinto historias de los sufrimientos y las luchas de mi familia. Sin usar palabras, me he convertido en un narrador mudo en el lienzo. Comencé mi carrera artística a una edad temprana, durante la invasión de Iraq en 2003, y el hecho de experimentar la guerra, los asesinatos, el abuso y el miedo tan temprano en mi vida me hizo pensar en cómo podría pintar realidades hermosas. Viajamos como refugiados a lo desconocido, buscando un lugar seguro al que llamar hogar, pero algunas de estas historias que he pintado, de mi dolor y mi trauma familiar, todavía muestran belleza y pasión.
Mi arte también cuenta historias de la antigua mitología árabe o del Oriente Medio, mientras que todavía comparto una parte de la historia de mi vida dentro de ella, entre líneas. Para mí, mi trabajo ha sido una conexión entre el pasado y el presente, lo espiritual y lo físico.
Diyar Al Asadi, Diyar, 2018. Acrylic on canvas. Handmade painting of 850 hours. Courtesy of the artist.
PhxArt: ¿En cuáles medios prefiere trabajar?
Al Asadi: Estoy entrenado en el arte islámico clásico y en caligrafía, que utilizo como inspiración y como medio para superar los límites de mi obra de arte para explorar la belleza, el equilibrio, el género, la religión, la cultura y la espiritualidad. Cuando trabajo usando técnicas de arte islámico tradicional, prefiero el acrílico sobre lienzo o el gouache sobre cartón. Paso semanas trabajando en los detalles de las obras de arte, y es más fácil usar pintura a base de agua porque se seca más rápido. También considero que los colores a base de agua y una tela de lienzo son los materiales más espirituales porque son básicos y fáciles de encontrar y usar, características que me parecieron especialmente importantes cuando pintaba de niño y mi familia tenía muchas dificultades económicas.
PhxArt: ¿Qué inspira el sentido de geometría y los colores audaces de su obra?
Al Asadi: Creciendo en Iraq, mi familia musulmana me llevó al santuario del Imán Alí y a otros hermosos y mágicos templos o mezquitas que normalmente contenían el cuerpo muerto de alguien santo, y siempre he reflexionado sobre cómo la perfección de la geometría y el color azul audaz combinado con la decoración blanca y dorada en el arte y los diseños de esos lugares los hacía de alguna manera aún más sagrados. En mis pinturas, que considero “arte islámico contemporáneo”, siempre quiero capturar una imagen sagrada y dársela a alguien que sienta lo mismo que yo.
Diyar Al Asadi, A Date between the Sun and Moon, 2020. Acrylic on canvas. Handmade painting of 700 hours. Courtesy of the artist.
PhxArt: ¿Cuáles técnicas y artistas influyen su obra?
Al Asadi: Utilizo muchas técnicas en mi arte, pero mi principal influencia es el arte islámico porque es donde encontré mi primera inspiración. Me gusta combinar las técnicas del arte islámico tradicional para mostrar de dónde vengo con las nuevas técnicas del arte contemporáneo para mostrar dónde estoy ahora.
Además, como mi familia viajó como refugiados de Iraq a Egipto, y luego a Jordania, mi madre lo vio como una gran oportunidad para mejorar mi arte y estudiar otras técnicas de varias tradiciones, con muchos grandes artistas y profesores. Si miran de cerca mis pinturas, verán que empleo todos los estilos que he aprendido, con el propósito de contar la historia de un viajero árabe.
En cuanto a los artistas, hay tantos que influyen en mis ojos, oídos y mente. Creo que todos somos pensamientos reciclados y por lo tanto todos estamos conectados. Principalmente escucho música mientras pinto, y suelo elegir el canto sufi o la música árabe clásica porque una canción puede durar hasta una hora. Mis cantantes favoritos son Umm Kalthom o Fairuz, y mis pintores favoritos son el artista asiático contemporáneo James Jean, el artista iraní contemporáneo de alfombras Jason Seife, y el artista islámico moderno Mohammad bagher Aghamiri.
Diyar Al Asadi, Gate of Baghdad Bahamut, 2021. Acrylic on canvas. Handmade painting of 2,300 hours. Courtesy of the artist.
PhxArt: ¿En qué ha trabajado o qué ha exhibido recientemente?
Al Asadi: El pasado noviembre, una pintura mía fue presentada en la Galería Sisao de la avenida Grand como parte de la 4ª exposición anual de beneficiarios de becas de la Fundación Carmody. También completé múltiples encargos internacionales en 2020 para personas y coleccionistas de arte que tienen un gusto por los estilos de arte contemporáneo e islámico evidente en mi trabajo.
PhxArt: ¿Qué puede esperar ver nuestra comunidad por usted próximamente?
Al Asadi: Phoenix ha sido mi hogar y mi comunidad desde que me mudé aquí en 2016, y me encantaría exhibir más en galerías y museos de toda la ciudad este año para compartir mis historias. Estoy trabajando en pinturas para una exposición individual que se presentará en mayo, pero la ubicación aún está por determinarse. Estoy emocionado, sin embargo, de mostrar a mi comunidad fenicia lo que está en mi mente por lo que está en mi lienzo. También gané un concurso para mostrar mi arte en una de las nuevas ciudades tecnológicas de China este año, así que estaré trabajando en eso también.
Diyar Al Asadi, The Savior, 2020. Acrylic on canvas. Handmade painting of 1,750 hours. Courtesy of the artist.
Estamos curiosos por saber cómo los creativos navegan el tiempo del coronavirus. Diyar Al Asadi comparte lo que le está dando vida como creativo durante la cuarentena.
Al Asadi: Esta época de COVID-19 es un momento muy triste en nuestro mundo. Dado lo que está pasando en casa con las familias de mis padres en Iraq, donde el medio ambiente es tóxico e inquietante, sin conciencia de la salud ni ayuda a la gente, mi familia y yo nos sentimos bendecidos por estar en un lugar que se preocupa y entiende lo que significa ser seres humanos. El hecho de tener a mis amigos y a mis cinco familiares aquí en Phoenix a mi alrededor durante este tiempo me ha dado mucho apoyo y ha hecho que mi vida sea un poco menos difícil cuando los clientes cancelaron el trabajo debido a la pandemia. La ciudad de Phoenix también me ha apoyado mucho; actualmente estoy trabajando en múltiples comisiones, así que me mantengo ocupado para seguir creando historias, ya que todo mi trabajo está agotado. También he estado ocupado mostrando a mi familia aquí cómo ser fenicios y lo que significa pertenecer a esta increíble y artística ciudad. A pesar de los desafíos de esta época, de las cenizas resurgimos, y sé que esta pandemia sólo nos hará más fuertes y nos dará más historias para contar en el futuro.
Diyar Al Asadi, Bahamut, 2019. Acrylic on canvas. Handmade painting of 900 hours. Courtesy of the artist.